jueves, 2 de julio de 2015

Un año de vivaces

La semana pasada me deslomé preparando y plantando mi segundo jardín de vivaces. Hacía exactamente un año que preparé y planté mi primer jardín de vivaces. La fecha, algo tardía para mi gusto y el de las plantas viene marcada principalmente por el calendario escolar de la comunidad de Madrid. La última semana de Junio ya no hay colegio y alguien tiene que tomarse vacaciones para cuidar a las niñas. Y yo que soy un padre esforzado y moderno no tengo inconveniente es sacrificarme por mi familia y tener una semana de vacaciones alrededor del solsticio de verano. Como mis hijas y yo nos conocemos bien y quizás no estemos del todo de acuerdo en lo de padre esforzado, para estas ocasiones hemos llegado a un acuerdo de convivencia que nos funciona bastante bien. Las mañanas, desde que amanece hasta que hay que preparar la comida, son todas mías, o lo que es lo mismo, de mi jardín. Las tardes son de las niñas para hacer lo que les apetezca. Les parecerá extraño como a mí, pero en sus tardes a mis hijas nunca les apetece esparcir carretillas de tierra, instalar sistemas de riego, roturar con una motoazada o plantar hierbas. No sé qué les pasa a estas nuevas generaciones pero siempre se decantan por hacer alguna excursión por la montaña, pasear en bicicleta o visitar a algún amigo. Sea. Un trato es un trato y las tardes son suyas. Así que me quedan las mañanas. El tamaño de mi primer jardín era perfecto para ejecutarlo en las mañanas de una semana de vacaciones. El tamaño de mi segundo jardín era desmesurado para ejecutarlo en las mañanas de una semana de vacaciones. En fin, lección aprendida con el precio de tener dolor hasta en las uñas. 
Durante este primer año, a base de aciertos y de muchos errores he podido comprobar lo ciertas que son muchas de las cosas que dicen los libros sobre este estilo de jardinería. La importancia del ritmo logrado a través de la repetición, el peso de las hierbas ornamentales para lograr un aspecto naturalista o los muchos juegos que pueden existir entre unidad y variedad o entre equilibrio y contraste. Y hablando de juegos, si tuviera que elegir una máxima fundamental esa sería: conoce las plantas y juega con ellas. El número de tus errores será inversamente proporcional a tu conocimiento de las plantas. Es imprescindible conocer en profundidad su aspecto marcado por cosas como estructura, tamaño, textura, colores o fechas de floración. Y no menos importante es ser capaz predecir su ecología que vendrá determinada por sus apetencia de suelo, humedad, exposición al sol y resistencia al frío y al calor. Si conoces todo esto y además tienes una base sobre preparación de terreno, riego, poda, plagas y lo que son o dejan de ser malas hierbas, entonces estás de suerte y puedes empezar a jugar con esperanzas de tener un jardín. Y en ese juego las reglas son tan innumerables como las infinitas combinaciones de plantas, así que pronto empezarás a volverte un poco loco con una lista interminable de especies que te gustaría tener y con su plantación en bloques, en matriz, mixtas o vaya usted a saber. Pero en cualquier caso, si eres capaz de tomarte los fracasos con deportividad, el asunto será divertido. En mi caso ha pasado un año y es un buen momento para ver algo del paso del tiempo por el jardín. Mientras el nuevo jardín empieza a calentar, aquí van unas fotos de las mejores jugadas de nuestro primer año de vivaces (en orden cronológico desde Agosto del 2014 hasta la semana pasada)




































Han participado en el juego con mayor o menor éxito: 
  • Allium hollandicum 'Purple Sensation'
  • Allium neapolitanum
  • Allium sphaerocephalon
  • Chrysanthemum x superbum 'Alaska'
  • Deschampsia flexuosa
  • Echinacea purpurea
  • Echinops banaticus 'Blue Glow'
  • Eragrostis spectabilis
  • Euphorbia amigdaloides var. robbiae
  • Cynara cardunculus
  • Cynara scolymus
  • Foeniculum vulgare
  • Hemerocallis citrina
  • Kalimeris incisa
  • Liriope muscari 'Big Blue'
  • Lythrum salicaria
  • Miscanthus sinensis 'New Hybrids'
  • Muhlenbergia capillaris
  • Rudbeckia subtomentosa
  • Salvia farinacea
  • Salvia nemorosa 'Blue Hill'
  • Salvia nemorosa 'Ostfriesland'
  • Stipa gigantea
  • Stipa tenuissima 'Pony Tails'
  • Verbascum thapsus
  • Verbena bonariensis

13 comentarios:

  1. Muy bonito Miguel. Te felicito, que sé del esfuerzo que implica pero también de las satisfacciones. ¿Has notado si alguna de estas especies es algo invasora y hay que tener cuidado? ¿o se pueden usar sin problemas?
    Un saludo.

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    1. Muchas gracias Lisa. En mi caso de momento ninguna se ha comportado como invasora. De semilla tan sólo he visto que se ha reproducido el hinojo, pero algo muy residual. Ni siquiera la Stipa tenuissima ha germinado en otras partes y eso que dicen que se extiende con facilidad. Las únicas que están siendo algo abusonas expandiéndose mucho en altura y anchura son las margaritas gigantes. No contaba con que se desarrollasen tanto y el año que viene tendré que cambiar de sitio al menos uno de los bloques. Y bueno, los Verbascum no los he plantado yo, han salido solos, pero tampoco diría que son una planta invasora, son muy típicos en nuestros montes.

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    2. ¡Genial! me preocupaban la Verbena bonariensis y la Stipa tenuissima. Mucho ánimo con los margaritones, que están bien bonitos :).

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  2. Estaba esperando como agua de mayo este post. Yo también te felicito, Miguel, tu jardín está espectacular!
    Buena pregunta la de Lisa, esperaré con ella la respuesta y ya nos contarás como va tu pelea con los margaritones...
    Un abrazo

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    1. Muchas gracias María José. Mi pelea con los margaritones está en un tiempo muerto. Los voy a dejar a su aire hasta el invierno y ahí trasplantaré al menos uno de los tres bloques que tengo. Y de los otros dos igual reduzco también algo, porque se han ido de madre. Por suerte tengo sitios más adecuados donde plantarlos, porque me daría pena deshacerme de ellos con lo bonitos que están. Y todo de un sobrecillo de semillas que compré hace no sé cuántos años.
      Otros en cambio se quedan cortos. Por ejemplo Kalimeris incisa tengo que poner alguna más para dar cuerpo, porque las que tengo apenas se ven. Y Echinops banaticus está siendo algo decepcionante. Sufren mucho con el pulgón y hongos. Tendré que probar con Echinops ritro, porque la flor me encanta.

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  3. Está espectacular Miguel y me encanta el acuerdo al que has llegado con tus hijas. Es mucho el esfuerzo que se necesita pero habéis hecho un trabajo fantástico. Un abrazo

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    1. Muchas gracias Marta. Y no es mal acuerdo, no. Podemos decir que nos mantiene a todos moderadamente contentos... o moderadamente poco enfadados :-)
      Un abrazo.

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  4. No conocía tu blog pero me ha gustado tanto que me voy a quedar!! :) Una gozada esas fotografías. Un saludo!! :)

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    1. Gracias a ti por comentar. Yo tampoco conocía tu blog y gracias a tu comentario he podido llegar a él. Tiene una pinta estupenda. Saludos

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  5. Me encantó el post!. Muuuy lindo quedó el jardín, valió la pena el esfuerzo, y lo mejor disfrutarlo con tus hijas!!

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    1. Muchas gracias. Sí, las niñas hacen que todo luzca bastante más.

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  6. Me ha encantado tu jardín. Estupenda entrada y mejores fotos. Ahora sólo me queda disfrutar otro tanto cuando nos enseñes tu segundo jardín de vivaces.

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    1. Gracias Marián. A ver qué tal se da ese segundo jardín. Tengo mucha ilusión puesta en él.

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